Las manos de la peluquera son su herramienta más importarte de las peluqueras. Están en contacto con las clientas a través del cabello y las encargadas de realizar la magia para convertir a la clienta en la imagen que tiene en su cabeza.
Los problemas comunes.
Por un lado, cuando la peluquera nos lava el cabello, nos aplica algún producto, etc… No siempre tenemos la precaución de protegerse con guantes adecuados. A consecuencia de estos actos consiguen que se deterioren la piel de las manos dejándola áspera e incluso con grietas.
También es costumbre realizar el grueso de la fuerza con las manos, al realizar trabajos como el secado a manos y planchado. Estos trabajos hacen que los daños a corto plazo sean molestos e irreparables a largo tiempo.
Como evitar los problemas.
Es recomendable realizar una sencilla tarea de diagnosticar si cuando trabajamos lo hacemos en la forma correcta para no acumular daños ni lesiones. Es importante trabajar en una posición correcta y con los materiales adecuados. Protegiéndonos debidamente frente a factores que puedan dañarnos.
También debemos controlar la intensidad del esfuerzo. Muchas veces es mejor trabajar a un ritmo inferior si hay que realizarlo durante un largo periodo de tiempo, que trabajar a más ritmo para acabar antes.